• 500 ml. de leche (se puede utilizar entera o semidesnatada).
• 1 cucharada de maizena.
• 75 gr. de azúcar (37,5 gr. de fructosa).
• 3 yemas de huevos.
• Un trocito de vainilla en rama.
• Un trocito de canela en rama.
• 1 limón.
• Galletas tipo María.
• Canela en polvo.

MODO DE HACERLO

1. En una cazuela echamos un poquito de agua (el fondo de ésta) y dejamos que hierva el agua y reduzca (para que no se pegue la leche)
2. Añadimos un poquito menos del medio litro de leche, un trocito de vainilla, un poco de corteza de limón (solamente la parte amarilla), y trocito de canela (para aromatizarla) dejando que se caliente a fuego lento, pero que no cueza.
3. Echamos en un bol el resto de leche que hemos reservado, las yemas de los huevos, la maizena, el azúcar y movemos con las varillas muy bien, hasta que quede una textura homogénea.
4. Retiramos la leche del fuego (quitamos de la misma, los trocitos de canela, vainilla y la corteza de limón) y añadimos todo lo que tenemos en el bol, y mezclamos todo muy bien (pero sin poner al fuego) para que se integren todos los ingredientes.
5. Cuando tengamos todo bien integrado, ponemos otra vez al fuego, y lo movemos con las varillas lentamente, hay que esperar un poco hasta que vaya espesando, y en el momento que espese lo dejamos 1 minuto y retiramos del fuego.
6. Repartimos en varios recipientes individuales, se dejan enfriar , y los introducimos en la nevera y están listas para comer.
7. Cuando las vayamos a comer se puede poner encima un poquito de canela en polvo o una galleta María.